Nuestro mismo estado de animo puede ser una mentira "estoy bien", "no me importa", "ya salí adelante". muchas veces lo hemos dicho y no fue cierto, pero quizás mas veces lo escuchamos y nos lo creímos. ya sea para no causar preocupación o por mero orgullo, no soltaras una lagrima seca frente a quienes te rodean, es mas facil esconderse tras una mascara, no perfecta, pero lo suficiente como para estar solo.
todos sufrimos de un engaño, alguien que dijo ser quien no fue, alguien que juro en vano, que traiciono la sagrada confianza que sobre ellos pusimos.
quizás también te as mentido a ti mismo, en forma de negación absoluta de lo obvio, de lo que prefieres no darte cuenta "lo que hice no fue tan malo", "ella no tiene la culpa", "no hubo otra opción".
todos mentimos, todos nos mienten, intentan engañarnos o lo hacemos nosotros solos, cerramos fuertemente nuestros ojos como si nada pasara con la ilusión de que al mirar de nuevo todo estará bien, creyendo las mentiras o queriendo que lo sean. en cualquier caso las mentiras forman la base de la civilización, es el engaño lo que nos separa de las bestias... nuestro rasgo mas humano esta el arte de mentir.
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